Análisis histórico artístico de los restos encontrados en la casa nº 13 Plaza de la Catedral, Mondoñedo. 2ª parte

Un tema interesante a tratar antes de continuar con el estudio del edificio en el que nos estamos deteniendo, es la conveniencia o no de liberar las paredes exteriores de reboco en los edificios de ladrillo morisco. Antes de nada conviene que concretemos que el uso de ladrillo cocido o secado al sol en las fachadas mindonienses es un sistema de muro ligero de tardía introducción. El tipo de pared que conocemos como Half-timbering o semi tapial, se remonta a diferentes modelos romanos conocidos como opus craticum, el mas primitivo sería el Wattle and daub o tapial de baras, donde para cubrir los espacios que quedan en la armazon de pies derechos y trabes, se utiliza un trenzado a modo de cestería de diferentes baras o palos flexibles de materia vegetal y animal mixta, desde alamo, hasta crin de caballo, para luego cubrir este con tierra y barro amasado. Estos intersicios particularmente ligeros siempre se recubrian de una gruesa capa de cal, pues el alma de arcilla resistía mal la humedad y la lluvia enfocada. Normalmente los enfoscados libraban a la armazón de ahi que en estos casos lo estraño sería encontrarnos con rebocos completos 
  
 
Es la imagen que todos tenemos de edificio medieval, además la estructura o armazón de palos se disponía de modo diferente a la que luego se usaría para cobijar ladrillo, tomando esta peculiar forma de ramas de arbol. De este tipo de obra, en el edificio Nº 13 de la plaza no nos queda nada o casi nada, restaba hasta hace poco una pared, formada por baras, cantos rodados, paja y barro que ha tenido que eliminarse por problemas de humedades con los vecinos, en su momento esta pared había sido exterior. La fachada la podemos incluir en el modelo que nombraremos como paso intermedio entre el Wattle and daub y la pared de ladrillos como tal. En este caso el proceso evolutivo es sencillo, normalmente se retira el tapial de barro, se substituyen parte de los palos de armazón para facilitar el asentado de los ladrillos rectangulares y se renueva el relleno con piezas de barro cocido. Podemos ver esta evolución en las marcas que dejan las trabes eliminadas en los pies derechos que permanecen en la obra. Este tipo de mejoras son típicas de trazas de obra del S. XVII y XVIII, incluso de principios del XIX. Abajo vemos el interior del muro frontero de la casa que estudiamos y otro ejemplo, este de centroeuropa donde se pueden ver diferentes evoluciones del Half-timbering 
 
Este tipo de obra es producto de una mejora en los materiales. discutible es que el muro de ladrillo sea mejor en cualidades termoestáticas, que el de tapial, pero por lo regular lo que nos encontraremos en las fachadas mindonienses donde no se ha mudado completamente por piedra o cachotería son paredes de armazones rectas y ladrillo morisco. Dejar estas paredes peladas entra dentro de las tradiciones reconstructivas europeas. Luego de las dos grandes guerras en parte por mor de ellas, muchos modos constructivos que habían permanecido ocultos por los rebocos salieron a la luz en los bombardeos, y en muchos casos su efecto visual prevaleció, a la hora de reconstruir paramentos, a la realidad histórica, estableciendo definitivamente la imagen que tenemos de ciudad medival, que por lo regular esta completamente equivocada. Por desgracia esta es una equivocación hoy ya irreversible, y muy dificil sería mostrar barrios medievales con las paredes enjalbegadas, al igual que unos pocos ladrillos y troncos a la vista hacen que una edificación retroceda en el tiempo varios siglos de manera completamente expúrea. Pero al final la cuestión es bien sencilla, hasta el momento se había primado por conservar, siguiendo el modelo de restauro típico contemporáneo, pero en partes de la ciudad donde la ruina amenaza, ¿es lícito eliminar cales y consolidar aparejos de ladrillo como medida paliativa?. Para mi sí, el aspecto de barrios enteros hoy llenos de pegotes de cemento, cal etc, mudaría completamente, es posible que estubiesemos cayendo en falsos históricos, en simples trampantojos o arquitecturas de decorado pero, ¿no se hace ya con completa impunidad regularmente?, en este caso solo se aplicaría a trabajos de restauro de urgencia y siempre respetando rebocos que pudiesen ser de interés. Por otro lado cuando destapamos un muro, aun con la intención de cubrir de nuevo y aparecen restos de otros periodos constructivos hoy inutilizados, ¿los tapamos o no? 

 
Otro de los elementos a destacar en esta planta y que igualmente data de la Edad Media, luego intentaremos suponer de cuando, sería el vano, posible ventana, por el interior adintelada con tímpano monolítico y al exterior con arco de medio punto compuesto por aproximacion de hiladas, tambien llamado falso arco. 
  
 
Aún de momento, hasta que no realicemos una lectura de paramentos más completa, es complicado asegurar que este vano sirviese solo como luz exterior y no como paso entre la parte habitada de módulo torreado para una longitudinal más cercana al unso como almacén, aunque francamente considero que esta segunda parte, donde no conservamos ningun resto constructivo significativo de periodo medival, es un añadido de periodo posterior, posiblemente del XVII, o XVIIII, valiendose de un muro que ya en su momento se levantaba posiblemente a modo de cierre amurallado. A estas preguntas tardaremos en poder responder, si es que lo podemos hacer algún día. Como digo siempre, esperemos a ver que nos cuenta el inmueble luego de su recuperación que se promete sensata. En lo que respecta al vano en si, su conformación es de cierto interés, digo cierto porque no sale demasido de lo común en obras de plena Edad Media, aunque se hace estraño para el S. XV o XVI, fecha en que lo encuadrariamos contando que sea producto de las reformas posteriores al incendio del XV. Para poner un ejemplo tenemos bien seguro multiples ejemplos locales, pero, francamente el único que he encontrado de momento nos remite a las obras de la ciudad fortaleza de Shatili, en el Caucaso....algo lejos....pero realmente desde que las cimbras fueron dominadas el método de aproximación de hiladas pasó de ser común a complejo e incómodo incluso....y os aseguro que de esto hace mucho tiempo. Solo podemos encontrarnos con este sistema tradicional y de origen prehistórico en construcciones muy populares, como es el caso....y aún asi con techo en el S. XII 
  
En el ejemplo que hemos podido estudiar vemos que el vano barroco (por decir algo) que está al lado de este y hoy da paso entre estancias, se abrió cuando el medieval ya hacía tiempo que se había amortizado y tapiado, de ahí que afectara a todo su lateral, provocando un leve desplome del tímpano monolítico de la parte interior, cuando se habría podido utilizar este mismo hueco, ampliando su luz y sin arriesgase a que el desplome resultase fatal para la integridad del inmueble. Provablemente esto sucediese cuando se construyó de cero desde cimientos una pared entre el inmueble 13 y el 11, desconocemos si acortando la plaza del 13. De todos modos, y teniendo en cuenta el tamaño de esta, que cumple aproximadamente con los extandares urbanos medievales, es mas razonable que este muro se levantase por problemas de colindantes y medianerías. No todo el mundo permitía que su casa se apoyase en el muro del vecino y más cuando las armazones en tijera terminaban en déviles y poco aparejados canalones de tejas entre casas. El muro compartido se convertía por lo regular en un colador para filtrar agua al interior. Asi en muchos casos se obliga a duplicar muros, o construirlos de nuevo para poder sostener otras obras, y este debe ser.
Asi la puerta hubo de ser desplazada y parte del vano medieval terminó viéndose afectado.. De todos modos lo mas interesante de este vano (ventana, puerta o lo que sea....) es que en su momento funcionó como chimenea natural, y cuando el fuego consumió las partes lígneas del edificio (suponemos que en el gran incendio del S. XV, mientras no se demuestre lo contrario, cosa que puede suceder mañana) guardó el sello del mismo en su luz, desde telarañas carbonizadas a simplemente hollín en cantidad. Sería interesante recoger muestra de el para un posible futuro estudio radiocarbónico, además al ser tapiado, el palo cargadero que serbía de soporte para el enlucido del exterior se mantuvo en su sitio, en muy mal estado pero íntegro, de el tambien se podrán tomar muestras e incluso puede que un taladro para un sencillo análisis dendrocronológico....puede que todo esto sea algo ambicioso, pero sería en todo caso lo correcto... 
 
De un edificio , solo de uno, y con un poco de trabajo de investigación estamos conociendo multitud de datos sobre la ciudad medieval de Mondoñedo, sobre su evolucion al renacimiento y sobre su esqueleto interno. Como de una gota de agua se puede inferir un océano o del perfil de un pilar gótico, como nos recuerda Johanes Alzog y luego Panofsky, podemos reconstruir todo el entramado de crucería de una bóveda y a traves de ella la planta de una catedral entera.
No creo que derroche alagos si recuerdo a nuestra alcaldesa como patrona de esta obra que, sin su perseverancia se habría quedado en el olvido, como decimos en mi tierra "para cada quen o seu".
Y sigamos pues...en la fotografía que podeis ver abajo, he trazado a groso modo el despiece de solares, del más primitivo, al final. Sabemos que el mas antiguo, de origen medieval, pues para terminar este estudio deberemos pararnos en un posible solar romano que incluso está en estos, considero que podría datarse en el S. XIII, y podemos delimitarlo por los pies con el actual frontis del edificio (mas o menos) y por la cabecera con la pared medianera actual del inmueble, que lo divide transversalmente en dos partes. Un segundo periodo más confuso sería el trazo que en la imagen podemos ver en rojo, de el hoy se conserva una buena parte en pie, otra eliminada y otra excindida y convertida en rocha. Parece que uno de los muros, la panda sur, como dijimos fué levantada desde cimientos entre el S. XVIII y XIX, mas el otro, la panda norte, parece que no presenta discontinuidad entre la obra más antigua y la que suponemos más moderna. Puede que simplemente la reconstrucción luego del incendio llevase a desfigurar los puntos de imbricación de los dos lienzos, dando ahora la sensación de estar el muro oeste, transversal, añadido a posteriori del muro norte; las diferentes reformas y añadidos para retocar zonas que en su momento debieron desmoronarse, complican el estudio de este pormenor, de todos modos el muro norte parece tener continuidad y pertenecer al mismo periodo histórico. Asi pues tocaría analizar detalladamente el mismo, tanto en aparejo como en rebocos. 
 
La primera planta, se comunica con las huertas traseras por lo que parece que fué parte de este perfil longitudinal. Hoy está completamente desfigurado pues en los años 60 del S. XX de cubrio de cemento tapando completamente el aparejo de mampostería. No asi en la segunda planta y en la que se puede entender como tercera. En ambas se conservan restos de reboco primitivo en un par de troneras abiertas en cada una, abocinadas y con aspecto muy primitivo aunque, dificilmente fechables. De todos modos en estos rebocos no se ven restos de fuego, ni bajo ellos, al contrario de lo que sucede bajo los frescos del frente, igualmente la disposicion de puntos de apoyo de bigas varía, de ahí que parezca provable que este muro sea de un periodo posterior, almenos al gran fuego del S. XV. Sin embargo la duda es si este paramento, que en su momento formaba parte de un importante edificio en forma de L, es contemporaneo a las obras de restauración del XVI o mucho mas tardíos. Para responder a estas preguntas seguiremos investigando; es un dato interesante conocer cuando se obliga a mudar la disposicion de las vertientes de los tejados, pues en esta obra aún se puede ver la armazón en tijera oculta. 
 
Además se pueden ver algunos bloques de piedra, pertenecientes en su momento a vanos medievales enrejados, reaprobechados en las últimas lineas de obra del último piso. Personalmente considero que es obra del XVI, pero está de momento por ver. Incluso podría contemplarse la posibilidad de ser parte de un muro mas antiguo que formase parte del cierre perimetral de alguno de los edificios mas nobles, posiblemente la casa del Arcediano de Trasancos, y en el que se apoyo la obra actual. 
 
Si esto fuese asi estaríamos estudiando el edifico de la aduana y el documento que transcribimos abajo, como sucede muchas veces, incluye reformas en el primitivo medieval que, aunque contratadas, nunca llegaron a realizarse, mientras otras sí, aunque no aparecen en este documento.
 
Como ya había anticipado, queda por estudiar de este edificio, que luego intentaremos identificar, una parte de enorme importancia. Como historiador del arte, archivero, cacharrólogo medival y demás oficios de ratoncillo de biblioteca y campo, aún podré, y espero que podais todos vosotr@s, aportar una buena porción de informació agarrándome firmemente a los restos recogidos en superficie durante las labores de acondicionamiento de la actual huerta de este inmueble, pero, hay un espacio que aunque documentaré aqui, no me corresponde ilustrar con teorías. Me refiero claro está a los restos arqueológicos localizados en la planta baja. Actualmente manejamos ya varias teorías sobre el posible origen de los mismos, su antiguedad y su relacción con el trazado urbano pre-medieval, pero, para ser justo este es un terreno donde se desenvuelve mejor nuestro arqueólogo municipal y amigo Avel Vigo. Unicamente dejaré patente que los muros de carga que hemos datado, mediante restos concretos, entre los S. XIII y XV con reformas en el XVII y XVIII, se asientan sobre otros, por supuesto anteriores, de los cuales se conserva en puntos hasta 2 metros de altura, mientras por lo regular apenas nos dejan cimientos y zanjas de fundación, donde hemos recuperado un arco adovelado, con la luz deformada y que pudiera leerse como cercano a la herradura (no resulta fácil) y que nos presentan un espacio cuadrangular, de unos 10 metros cuadrados, que podría ser de origen altomedieval o hasta romano. Son todas estas, teorías, de momento, poca cerámica se ha rescatado en estas intervenciones regladas, y de ella la mayoría que pudiera acercarnos a esta deducción es popular. Bien es cierto que toda la huerta está compuesta por diferentes paquetes de revuelto, de hasta 3 metros de potencia, y que de ella se han rescatado piezas de TSH en superficie; pero, como he dicho de momento cualquier apuesta sería aventurada. En breve se iniciará el estudio de todo el edificio, necesario para su reconstrucción, esperemos pues a los resultados de este para concretar más, solo un par de fotografías para que, quien lo desee, empiece a imaginar. 
 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Un ingles en Mondoñedo, John Dutton, Mercader de aceite en los últimos años del reinado de Maria Tudor.

Del alcalde mayor al corregidor, la nueva figura del poder absoluto, confictos en la gestion municipal en el Mondoñedo del S. XVI

El Pintor Juan Llombart, 1587